Regularización

En la primavera de 2010, el Sr. Nicelli fue contactado por un empleador que dirigía una empresa de arquitectura paisajista. Estaba muy preocupado porque no trabajaba ni para agencias municipales ni federales situadas en el Estado de Nueva York. En 2000, el empleado buscó la ayuda de un abogado, que presentó una solicitud de certificación laboral. Sin embargo, diez años después, el empleado seguía sin tener permiso de trabajo ni domicilio. El empleado también recibió la notificación de que su ajuste de estatus había sido rechazado y se encontraba en proceso de expulsión. El Sr. Nicelli fue informado de que el abogado había desaparecido y posteriormente fue inhabilitado. Como su bufete estaba cerrado, no se pudieron localizar los expedientes relativos al empleado. El Sr. Nicelli se puso entonces en contacto con el Departamento de Trabajo del Estado de Nueva York, el Departamento de Trabajo de Estados Unidos y el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos para obtener copias de los documentos que pudieran haberse presentado. También compareció ante el Tribunal de Inmigración de Nueva York, donde se le concedió un plazo adicional para resolver las cuestiones. Tras cometer errores importantes, se puso de manifiesto que el abogado había presentado tres solicitudes de certificado de trabajo del empleado, dos de las cuales fueron denegadas. Tras localizar todos los documentos pertinentes, el Sr. Nicelli pudo obtener la aprobación de un visado de inmigrante I-140 y posteriormente solicitó el ajuste de estatus. Posteriormente se puso fin al procedimiento de deportación y se concedió al empleado la residencia permanente.